Conseguir un embalaje óptimo para que los productos se mantengan estables y seguros durante los traslados no solo depende de una elección adecuada de palets, cintas de embalaje o abrazaderas. También influye, en gran medida, el tipo de flejado que se utilice. En este punto, es preciso tanto aplicar la tensión adecuada como elegir el tipo de fleje más apropiado para las necesidades de cada mercancía: - Flejes de plástico. En RAJA® ponemos a su disposición dos tipos de flejes para embalaje fabricados con plástico: - Flejes de polipropileno: soportan muy bien las inclemencias del tiempo y los cambios de temperatura, son flexibles y se adaptan a la forma de los productos sin estropearlos. Son la elección perfecta para cargas ligeras y almacenaje de corta duración. - Flejes de poliéster: son resistentes a las oscilaciones de temperatura, a la humedad y a los efectos de los rayos UVA. Muy elásticos, por lo que resultan perfectos para amortiguar los golpes. Además, no pierden tensión con el paso del tiempo, por lo que son adecuados para cargas pesadas o almacenaje exterior y de larga duración. - Flejes textiles hilo a hilo. Este tipo de flejes son flexibles, manejables, seguros y resistentes, características que los convierten en la elección perfecta para paquetes pesados, largas estancias a la intemperie y productos que necesitan mucha seguridad. Las cargas heterogéneas y los artículos de madera o cristal requieren de flejes textiles, ya que se adaptan a su forma sin dañarlos.